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domingo, 23 de febrero de 2014

Los Grandes Sabios...

LOS GRANDES SABIOS

Estos fueron los hombres de todos los tiempos que se atrevieron a osar en los misterios ocultos del cosmos. No fueron hombres distintos sino osados que retaron a la naturaleza aplicando la ciencia y el dogma en su justo equilibrio; requisito indispensable para la realización personal.

CORNELIUS AGRIPPA de NETTESHEIM (1486-1533/5)



Enrique Cornelio Agrippa de Nettesheim fue amigo del abate Tritemo, que fue su maestro y corresponsal de Erasmo, de Melachton y de la mayor parte de los mentalistas de su tiempo. Nacido en Colonia enseño en Dola y en Pavia. Recorrió Italia, fue médico en Turín y abogado en Metz. El Papa León X le llamaba "su amado hijo".

Según Agrippa la magia se basa en tres disciplinas: la física de condición terrena, las matemáticas que son celestiales y la teología que es la ciencias de los arquetipos.

Por el estudio de la naturaleza el sabio llegará a conocer las piedras, y por el estudio de las piedras descubrirá la esencias de las estrellas. El estudio de los planetas le llevará al conocimiento de lo absoluto.


Los cuatro elementos, el fuego, el agua, la tierra y el viento, mezclados aquí abajo existe también en las estrellas pero en estado puro. La observación de las leyes naturales, lanzadas por analogías y correspondencias de una parte en los principios de la afinidad y enemistad de la otra, otorga al adepto la omnipotencia mágica.

En el arte de los talismanes y amuletos, que resulta inseparable por lo tanto, de la ciencia de los números. Agrippa desarrolla este tema en su famosa Filosofía Oculta.

 En el plano iniciático, Agrippa,  había fundado en el comienzo del siglo XVI una comunidad de los magos que congrego a los alquimistas y teósofos de la época. Hacia 1510 viajo a Inglaterra, estableciendo una congregación idéntica con ayuda de Juan Collet. Del seno de estas asociaciones habría nacido la Fraternidad de los Rosacruces durante el siglo siguiente.

***

Médico y filósofo. Uno de los sabios de su tiempo. Nacido en Colonia y murió en 1583/5, enseña teología en Dóle, fue profesor en Pavía, después de haberse doctorado en derecho y en medicina, y participa en el Concilio de Pisa.

Tras haber tomado parte en muchos combates en Italia, fue abogado en Metz, después médico de la familia de Saboya, y finalmente historiógrafo del Emperador Carlos.  después de una existencia sumamente azarosa, en casa del receptor general de Grenoble. Su talento fue el génesis de su desgracia. Era demasiado instruido y erudito para su época.
Le acusaron de brujo y en más de una ocasión hubo de huir al trote de una plebe exacerbada, ignorante y belicosa, que le imputaba un sinnúmero de absurdos.

Los demonomaníacos dicen que no se le puede representar sino de noche, como un búho, a causa de la fealdad mágica, y no pocos historiadores aseguran que en sus viajes pagaba a quienes le daban hospedaje con moneda muy fuerte y buena al parecer, pero que a los pocos días se convertía en pedazos de cuernos, de concha o de cuero.
Mientras enseñaba en Louvain, refiérese que uno de sus alumnos, leyendo un libro de conjuros, fue ahogado por el espíritu maligno y temiendo Agripa que sospechasen que hubiera sido él su asesino, ordenó al diablo que entrase en el cuerpo del difunto y diese siete u ocho vueltas por la plaza pública antes de dejarle.

Obedeció el maligno y el joven cayó sin vida ante la multitud, siendo admitida su muerte como defunción repentina. Compuso Agripa una obra de filosofía oculta que le mereció la animadversión de los necios, algunos de los cuales, sujetos de eminente rango, consiguieron expulsarle de Flandes, adonde no pudo volver jamás.

Después de recorrer Italia, pasó por Dobe, instalándose finalmente en Lyon, donde, sin poder alguno, empleó todo los medios posibles para vivir, meneando lo mejor que podía la punta de su bastón, pero ganaba tan poco que murió pidiendo limosna en Grenoble, aborrecido por todo el mundo y detestado como un mago maldito porque aseguraban que, de continua, le acompañaba el diablo en forma de perro negro.

León X le denominaba, “hijo muy querido”. lo que no impide a los dominícos mantener feroces luchas con él y muchos tratarle de charlatán. Fue un apasionado de la cábala y de la magia que, decía, permitía comunicar “con las fuerzas de un plano superior para dominar las de un plano inferior”.

 Divide el macrocosmos en tres mundos, regidos cada uno por una magia: física, astral y religiosa. Para alcanzar estas magias, es preciso “morir para el mundo”. Obra principal: De occulta philosophia.
Murió en Grenoble, en la miseria.


APOLONIO DE TRIANA


"Cuando os diga por ejemplo que el divino Apolonio de Triana fue concebido sin operación de hombre alguno, y que una de las mas altas Salamandras descendió para inmortalizarse con su madre, diréis que esta Salamandra era un demonio (...). Apolonius no nació de un hombre, conoce el lenguaje de los pájaros (...) resucita a una muchacha con la virtud de la onomancia (...)" Conde de Gabalais.
Apolonio de Triana

Este Apolonio a quien el Conde de Gabalais atribuye un origen tan curioso nació en Triana cuatro años antes que Jesucristo.  Neopitagórico convencido, no comía carnes ni ciertas hierbas y se abstenía de beber vino. En el curso de sus numerosos viajes (Italia, India, Babilonia, Etiopía, España) había realizado extraordinario prodigios.

Taumaturgo, hubo de devolver la vida a una muchacha joven. Se ha comparado muchas veces con J.C., siendo ambos profetas y taumaturgos, pero uno permaneció pagano en tanto que el otro se convirtió en fundador de una nueva religión triunfadora.

Según la leyenda, Apolonio murió a los cien años. Otros dicen que desapareció y voló al cielo, reencarnándose después, hacia el siglo XII bajo la forma del gran alquimista Artephius. La vida de Apolonio de Triana ha sido relatado por Filostrato (siglo II después de J.C.).

De su obra se destacan Núctameron que resumido expresa:

Primera hora: en la unidad, los demonios cantan los méritos de Dios pierden su malicia y su cólera
Segunda hora: por el binario los peces del zodiaco cantan los méritos de Dios, las serpientes de fuego se enlazan en torno al caduceo y se tornan armoniosas.
Tercera hora: la serpiente del caduceo de Hermes se entrelazan tres veces, el cancerbero abre su triple boca y el fuego canta lo méritos de Dios con las tres lenguas de rayos.
Cuarta hora: el alta vuelve a visitar las tumbas. Es entonces cuando se encienden las mágicas lámparas en los cuatro rincones de los círculos, es la hora de los encantamientos y los prodigios.
Quinta hora: el espíritu permanece inmóvil, ve que los monstruos infernales machan contra el pero no les tema.
Sexta hora: la voz de las grandes aguas cantan al Dios de las esferas celestes.
Séptima hora: un fuego que da vida a todos los seres animados es dirigido por la voluntad de los hombres puros. El iniciado extiende la mano y los sufrimientos se apaciguan.
Octava hora: las estrellas hablan; el alma de los soles corresponden al suspiro de las flores, cadenas de armonía que hacen que todos los seres de la naturaleza se correspondan
Novena hora: el numero que no debe ser revelado.
Décima hora: es la llave del ciclo astronómico y del movimiento circular de la vida de los hombres.
Onceava hora: las almas de los grandes genios se agitan con un ruido misterioso, vuelan de una esfera a otra y llevan de mundo en mundo a los mensajeros de Dios.
Doceava hora: aquí se consumen por el fuego de las obras de la  luz eterna.
Las doce horas de Núctameron están presididas por genios. Agreguemos que en el ritual de apertura de las trabajos de la orden martinista (fundada por Papus) se alude al cuadrante de Apolonio de Triana.

Estos son los pensamientos de APOLONIO:

"No hay muerte de nadie, sino sólo en apariencia, así como no hay nacimiento de ninguno, salvo en lo exterior. El cambio de ser a devenir parece ser nacimiento.

El cambio de devenir a ser, parece ser muerte, mas en realidad ninguno realmente nace, así como ninguno realmente muere.

 Es simplemente el hacerse visible y luego invisible; la primera por la densidad de la materia, y la última por la sutileza del Ser, Ser que es siempre el mismo, siendo su único cambio el movimiento y el reposo".


ELIPHAS LEVI (1810-1875)

Su verdadero nombre fue Alfonso Luis Constant, recibió las ordenes menores (a la que se debe su título de Abate Constant) antes de entregarse a la política y luego al ocultismo.

Hace pintura y escribe panfletos de extrema izquierda, lo que le vale una temporada en prisión. Es en esta época cuando descubre a Saint-Martin y a Swedenborg. Encuentra a Ganneau y descubre la bipolaridad expansiva y comprensiva del Universo. Por ultimo, se convierte en discípulo de Wronski.

En Londres donde se refugia, se inicia en la rosacruz, estudia la Cábala, evoca a Apolonio de Triana y se pregunta si el mismo no será una reencarnación de Rabelais.
Tras regresar a París cambia de nombre y adopta el seudónimo iniciatico de Eliphas Levi Zamed. De aquí en mas la suerte estará echada. Eliphas Levi rompe sus vínculos con Ganneau, Esquiros, Fourier.

Su admiración por Swedenborg declina; no tiene mas que un maestro Wronski. Solo le queda una sola pasión: la Cábala. Entre otras obras le debemos un Dogma y ritual de la alta magia.
ELIPHAS LÉVI "ZAHED"
El Pentagrama mágico
Cuando se indaga en la historia del ocultismo, hay muchos nombres e innumerables obras, aunque sin duda si estudiamos el ocultismo del siglo XIX hay un nombre que resalta por su gran aportación al ocultismo y esoterismo moderno: Eliphas Lévi, cuyo nombre en realidad era Alphonse Charles Constant (1810-1875).

Eliphas Lévi nació en París en 1810. Hijo de un zapatero, desde muy joven se sintió atraído por la mística, y por eso ingresó en el Gran Seminario de Issy, donde cursó estudios clericales. Como alumno aventajado en su carrera clerical, pasó por el diaconato, para más tarde ser ordenado sacerdote, aunque no lo fue mucho tiempo, ya que acabó expulsado por la iglesia debido a sus ideas heréticas y por no haber mantenido el voto de castidad.

En los años posteriores, Lévi sufrió en sus carnes la miseria tanto material como espiritual y hastiado ingresó en 1839 en la abadía benedictina de Solermes, creyéndose destinado a la vida monástica, aunque sólo permanece interno durante un año, el tiempo suficiente para escribir en secreto su primera obra, “La biblia de la libertad”, obra que fue considerada como perniciosa y pecaminosa por la Audiencia de París y por la que fue condenado a 11 meses de prisión, siendo liberado en abril de 1842.

A partir de su liberación, atraído por el ascetismo empieza a frecuentar bibliotecas donde descubre con admiración los secretos del hermetismo, estudiando a Martines de Pascually.

Ya adentrado en la magia y la masonería, es animado por el historiador masónico Ragón a escribir una de sus obras más importantes, “Dogma y ritual de alta magia”, la cual firma con dos letras hebreas, iniciales del nombre que utilizaría a partir de este momento: Eliphas Lévi, el equivalente hebreo a su nombre de nacimiento.

En marzo de 1854, llega a Londres donde conoce al rosacruz Sir Edward Bulwer Lytton (autor de Zanoni), entre ellos crece la amistad y motivados por su devoción por la magia se entregan juntos a experiencias místicas. Lévi se retiró durante 21 días a un templo londinense, practicando la meditación, acompañada de una estricta dieta vegetariana, y ayunando durante dos semanas para al final aparecerse ante él el teúrgo Apolonio de Tiana.

A partir de entonces su reputación de erudito y maestro crece rápidamente y Lévi empieza a dedicarse a la alquimia y a atender consultas de tarot y quiromancia. De 1865 a 1874, Lévi fue Imperator de una importante sociedad secreta iniciática: Los Hermanos Mayores de la Rosacruz.

Entre otras cosas, la aportación de Lévi al ocultismo es su acierto en el dibujo y la interpretación esotérica de Baphomet. Además, Lévi fue el primero en adaptar el pentagrama invertido como símbolo material ante el espiritual, del derecho.

Hizo dos ilustraciones del pentagrama. En la primera, la derecha, dibujó a un hombre dentro de las cinco puntas de la estrella simbolizando cada uno de sus miembros con uno de los cuatro elementos -tierra, aire, agua y fuego-, estando la cabeza representada por el espíritu, los nombres Adán y Eva escritos dentro de la estrella y las letras hebreas correspondientes a la palabra Yeshua a su alrededor. Al dibujo, lo llamó “El Hombre Microcósmico”.

En la ilustración del pentagrama invertido, Lévi dibujó dentro de la estrella la cabeza de Baphomet, los nombres de Samael y Lilith dentro de ella y la palabra Léviatán alrededor. Al interpretar ambos pentagramas formó por primera vez una diferencia entre el simbolismo humano-material y el divino-espiritual. También aportó estudios sobre los 22 arcanos mayores del tarot, asociándolos a las letras del alfabeto hebreo y a sus aspectos divinos.

Además de las obras ya citadas, Lévi dejó otras obras de gran importancia para el esoterismo y el ocultismo, tales como “Historia de la magia”, “La magia trascendental” o “La llave de los misterios”, entre otras. Sus obras influenciaron a otros grandes ocultistas como Aleister Crowley, quien proclamó ser la reencarnación de Lévi.

Eliphas Lévi, cabalista, rosacruz y masón, hizo de sus escrituras su vida y de su vida magia, siendo sin duda uno de los ocultistas más importantes del siglo XIX. Lévi falleció en 1875 a la edad de 65 años, no sin antes dejar un importante legado para los amantes del ocultismo.
Eliphas Levi Zahed

El verdadero nombre de este cabalista era Alphonse Luís Constant. Nace en París en 1810 y fallece a los sesenta y cinco años de edad en 1875; alumno brillante es admitido en el Gran seminario de Issy, regido por Sulpicianos, y donde es Iniciado discretamente hacia el estudio de la Magia.

El seminarista fue admitido al diaconato y en 1816 sería ordenado sacerdote, abandonando al poco tiempo el seminario. Conoce la miseria y al cabo de algunos meses de angustia material y espiritual se cree destinado a la vida monástica.

Marcha en 1839 a la abadía benedictina de Solesmes y permanece solo un año, escribiendo a escondidas su primera obra “LA BIBLIA DE LA LIBERTAD”; considerada como sediciosa es condenado por la Audiencia de París a once meses de prisión, siendo liberado en abril de 1842. Subsistiendo gracias a las canciones que escribía, Constant, claramente atraído por el ascetismo, frecuenta las bibliotecas donde descubre con embeleso los tesoros del hermetismo.

 Estudia a Jacob Bohna, Martines de Pasqually, Fabre d´olivet y otros. Animado por Ragón, el historiador masónico, Constant publica en forma de fascículos su primera gran obra “DOGMA Y RITUAL DE ALTA MAGIA” que firma con dos letras hebreas, iniciales del nombre que a partir de entonces utilizaría: ELIPHAS LEVI.

 Llega a Londres en la primavera de 1854, donde superiores desconocidos le conducen cerca de un rosacruz, Sir E. Bulwer Lyton, (autor de “ZANONI”), y en su compañía se entrega a experiencias teúrgicas. Tras un retiro de 21 días en un templo Londinense, se le aparecen dos entidades, un misterioso Joannes y el teúrgo Apolonio de Tiana. Recibe de ellos enseñanzas, una parte de las cuales difundirá él en sus libros, pero guarda la parte esencial para comunicaciones secretas a sus raros discípulos.

Su reputación de erudito y maestro crece aceleradamente. Se dedica a experiencias alquímicas y atiende consultas de tarot y de quiromancia. Eliphas Levis fue desde 1865 a 1874 Imperator de una sociedad secreta de un elevado valor Iniciático : LOS HERMANOS MAYORES DE LA ROSA CRUZ.

El sucesor de Eliphas Levi, tanto en la Societas Rosicrucian in Anglia (SRIA), como al frente de los hermanos mayores de la rosa cruz, fue William Wynn Westcott (1874-1892) uno de los miembros fundadores de la GOLDEN DAWN. La influencia de Eliphas Levi es considerable y sigue creciendo.

Su obra ha suscitado y aún suscita reacciones fervientes de numerosos ocultistas. Como dice Víctor Emile Michele:
 
Los 4 nombres cabalísticos: AZOHT, INRI, TARO, ROTA.


OBRAS MÁS FAMOSAS:


Dogma y ritual de alta magia; la clave de los misterios; Historia de la magia; leyendas y símbolos; la ciencia de los espíritus; el libro de los esplendores; los misterios de la kábala y curso de filosofía oculta.
LEVI Éliphas (1810-1875)

Alphonse-Louis Constant, hijo de un zapatero remendón, fue un autodidacta presuntuoso: mal canzonetista, como pintor uno entre tantos, poeta mediocre, diácono exclaustrado antes de la ordenación, encarcelado varias veces por anarquía.

En julio de 1854, en Londres, evoca el espíritu de Apolonio de Tyana, se consagra a la cábala y se compromete con la Rosa-Cruz inglesa. Encuentra al polonés Wronski, inventor del prognómetro o máquina de predecir.

Vuelto a París, se titula « magista » bajo el nombre de Eliphas Lévi Zamed, y edita “La Revue philosophique el religieuse” en la que colaboraron Michelet y Littré y que fue prohibida en l858.
Publica a continuación el “Dogma y el Ritual de la alta Magia” e inicia por correspondencia a los discípulos afortunados. Su “llave de los grandes Misterios” fue juzgada extravagante por la oficialidad de París. Se ha presentado a veces en reencarnación de Rabelais y Alesteir Crowley decia ser su reencarnación.
 

JOHN DEE (1527-1608)


 Descubrió un alfabeto mágico que los nigromantes todavía comprenden poco, pero al que temen y respetan por su poder para desatar las fuerzas elementales más fantásticas.

Este sabio llamo a su sistema Las claves o cifrfas de Enoch, dándole el nombre del profeta Enoch, quien "había caminado con Dios y no se le halló" (Hebreos 11,5).

Lo había recibido por conducto de su medium Edward Kelly (aka Tabot), quien tras escudriñar en un cristal o piedra de mirar que era propiedad de su maestro astrólogo adivinó los signos que llegó a percibir en sus difusas profundidades.


Todas las palabras del alfabeto de Enoch que Dee afirmaba haber recibido de una fuente supraterrenal le habían sido dadas una a una, de atrás hacia adelante.

El espíritu que le había transmitido el alfabeto había atribuido tal proceder al gran poder de las fuerzas mágicas que animaban a ese alfabeto, ya que, si las letras se hubiesen dado en el orden correcto, se abría podido desatar, y por lo tanto causar, una indescriptible catástrofe.

Cada palabra representaba un nombre desconocido hasta ese momento de Dios, de sus ángeles y de los espíritus elementales, y Dee copio las palabras utilizando para ello un cifra a fin de ocultar una vez más el significado a los no iniciados. Mas tarde elaboró esta cifra y creo cinco cuadrantes o tabletas de Enoch o enoquianas.

Los ocultistas aun hoy, todavía insisten en que las cifras enocianas son llaves para abrir las puertas astrales de otra dimensión que estaría mas allá de las limitaciones normales del tiempo y del espacio.

Y que si se llegará a abusar de ellas en cualquier forma, esas tabletas elementales pueden liberar poderes de gran potencia destructiva que operarían por medio del elemento que está representado en cualquier tableta. Se cuenta de incendios repentinos que estallan de cañerías que revientan o de pisos que se hunden como resultado del manejo inexperto de la magia enóquica.
Como las personas que se dedican con entusiasmo a las prácticas del ocultismo tienden a ser un tanto curiosas el relato que a continuación se publica explican los que puede pasar con el "divertirse con la magia de Enoch".

Haciendo la salvedad de que el operador se haya hecho volar en mil pedazos astrales, ¿a que mundo accedería por la evocación cuidadosa de las palabras de poder enóquicas?

A continuación se describen las experiencias que puede esperar el mago una vez que las fuerzas enóquicas han sido convocadas. 

Verá los hermosos colores que matizan estos nombres enóquicos) sentirá la fuerzas que de ellos emanan y se sentirá transportado hacia un mundo desconocido que hace muchísimo tiempo abandono esta tierra.

 Caminará por las extensas praderas y las altas montañas de un antiguo y extraño reino en el que cruzan caballos de ojos rojos montados por dioses singulares, cubiertos de capas de colores puros. Verá levantarse al sol por entre oscuras montañas para iluminar el cielo de oro y violeta.
 

Theophrastus von Hohenheim (Paracelso)

PARACELSO Théophrast Bombast von Hohenheim (1493-1541)

Nacido en Suiza, en Einsielden. Debió hacer los estudios de medicina en Ferrara. Muy pronto, ataca a los médicos. Viaja muchísimo.

Conferenciante en la Universidad de Basilea, escandaliza por su inconformismo, criticado por médicos y boticarios.

Gran mago, habría trabajado la alquimia con el abate Jean de Tritheim: empleando el imán, fue un precursor del magnetismo y de Mesmer. Predicando la omnipotencia de la fe, denostaba a Lutero.

Renovando la medicina, predica la comprensión de la naturaleza, el estudio de los remedios (teoría de las « signaturas » base de la homeopatía divulgada ulteriormente por Hahnemann) la observación clínica, la patología general (en su “Paraminum”).
Philipus Aureolus Theophrastus Bombastus von Hohenheim, llamado Paracelso, médico muy conocido en la vieja Europa, muere en Salzburgo el 21 de septiembre de 1551. Es muy conocido por la práctica de la medicina natural y por la cura por medio de la alquimia y los símbolos del zodiaco del que es creador de un sistema especial de talismanes.

Alquimista y mago, Paracelso difundió notablemente sus obras en varios tratados entre los que se destacan El libro de las ninfas, silfos y de los demás espíritus de la naturaleza, sobre este tema en particular se dice que muchas de las fantasías de Disney, fueron inspiradas en  Paracelso.

 Este libro es el primero que describe con precisión los espíritus ocultos de la naturaleza.

La siguiente frase extraída del mismo define muy bien esta cuestión: "no solo conocemos muy bien la creación de todas las cosas naturales, sino que somos también conscientes de ellas, así como todo cuanto Dios ha creado, por lo que cada nación reconoce lo que es propio, lo que en ella existe y crece al igual que todo hombre tienen conciencia de si mismo, por lo tanto está en posesión de un oficio y tiene experiencia en los asuntos de su incumbencia.

De esta suerte sabemos que todas las criaturas creadas por Dios, nada hay oculto, nada que no le sea conciente al hombre o de lo que no pueda llegar a tener conciencia.

FRANCIS BACON

Francis Bacon ha  sido una de las personas que más ha contribuido a la transmisión de la sabiduría interior, siendo considerado por muchos como padre de la ciencia moderna por cuanto fue promulgador del empirismo, o comprobación experimental. 
Insigne Rosacruz, es considerado por muchos como el autor secreto de las obras de William Shakespeare, siendo muchos los indicios de que tal posibilidad es muy digna de tenerse en cuenta, por cuanto que las obras atribuidas a Shakespeare están escritas en un lenguaje criptográfico, en el que aparecen las marcas de Francis Bacon. 
Este retrato, cuyo grabado original se encuentra en la Sede Soberana de la Orden Rosacruz, cuando se superpone sobre el retrato de William Shakespeare,  se obtienen asombrosas coincidencias y similitudes que dan que pensar sobre la realidad de dicha posibilidad.


ROGER BACON

(1214-1294)

Nacido en Ilchester en el Condado de Somerset. Se hizo matemático en París, y después franciscano en Oxford. De una ciencia universal, fue el primer europeo en controlar las bases de la química en su “Espejo de la Alquimia”. Sólo se fiaba de la experiencia.

Una leyenda inglesa le atribuye también la creación de un misterioso androide.
En su “Tratado de las obras secretas de la naturaleza y del Arte”, predice las invenciones que habrán de realizarse (volar por los aires, puente colgante, coche sin caballos, etc.) pero esta obra le cuesta prisión por brujería. El papa Clemente IV le libra de ella.


EMANUEL SWEDENBORG

(1688-1772)
Retrato de Swedenborg a los 80 años (1768)
Óleo sobre lienzo de Fredrik Bränder (Nordiska Museet, Estocolmo)

Emanuel Swedenborg, científico, filósofo y autor de gran número de obras religiosas, es uno de los suecos de renombre internacional.
Honoré de Balzac llegó hasta llamarle el Buda de los países nórdicos. Swedenborg, que vivió varias décadas en el extranjero, en Amsterdam y Londres, tuvo fuertes vivencias religiosas y consideró que podía dar cuenta de vislumbres tanto del cielo como del infierno.
Los discípulos congregados a su alrededor en Londres fundaron, algunos años después de su muerte, la Nueva Iglesia, que posteriormente, tuvo nuevas comunidades en Inglaterra, Estados Unidos y Australia, entre otros países. 
Su obra ha sido traducida a 30 idiomas, y la Sociedad Swedenborg de Londres ha asumido la tarea de lograr que no se olvide al místico sueco. Se considera que, además de Balzac, ha influido en muchos autores, entre otros, Baudelaire, Strindberg y Yeats.
Tercer hijo de un obispo luterano ennoblecido por la reina Ulrika Eleonora, nació en Estocolmo en 1688. En 1709 se graduó en la Universidad de Upsala y en 1716 fue nombrado asesor del Real Colegio de Minas.
Una sustanciosa herencia le liberó de las ataduras de una vida funcionarial, permitiéndole convertir en realidad los proyectos filosóficos y científicos que bullían en su cabeza. Fueron saliendo así paulatinamente de prensa en Upsala, Leipzig, Dresde, La Haya, Amsterdam y Londres, sus tratados científicos (Principios de las cosas naturales, La organización del reino del alma, El reino del alma, Psicología racional..) 
En torno a 1774 una extraña crisis (que muchos califican de religiosa) interrumpía la brillante carrera científica de Swedenborg, transformándole súbitamente en un tránsfuga de la ciencia.
De esta época datan obras que se consideran textos puente entre ambas etapas de su producción (El libro de los sueños, físico y filosófico). Sus publicaciones a partir de 1745 son extrañas obras visionarias, filosóficas, teológicas y místicas (Los arcanos celestes, Apocalipsis revelado, El Último Juicio y la Babilonia destruida, El Caballo blanco...) en las que trata de superar toda dicotomía radical entre mundo científico y mundo filosófico-teológico, extrapolando las categorías del saber científico a la esfera espiritual.
En esta segunda etapa se amalgaman inquietudes religiosas y metafísicas, cuestiones de hermenéutica bíblica y los mismos problemas científicos que con anterioridad suscitaban su interés, solo que ahora ransformados por la experiencia mística.
Con todos estos elementos Swedenborg construye un sólido sistema de una gran coherencia interna que ejercería una notable influencia (teológica y literaria) en el romanticismo, simbolismo y otras corrientes posteriores.
Editor y redactor de la primera revista sueca sobre tecnología y ciencia (Daedalus hyperboreus), fue, además, miembro de la más temprana sociedad científica de su país (Collegium curiosorum), corresponsal de la Academia Imperial de las Ciencias de San Petersburgo, académico de la Real Academia Sueca de las Ciencias a propuesta de Linneo y diputado en la Cámara de los Nobles del Parlamento sueco.
Viajero infatigable, recorrió gran parte de Europa en un total de once viajes y veintidós años fuera de su país. Murió en Londres en 1772, a los 84 años de edad.
La recepción de Swedenborg desde entonces ha sido desigual. Tras una primera época en la que ningún hombre culto ignoró a Swedenborg y sus obras fueron traducidas a numerosos idiomas, a comienzos del siglo XX, el positivismo y el materialismo colapsan el interés por Swedenborg y la opinión sobre él cambia de signo. 
Dictámenes freudianos le declaran perturbado, e incluso la propia Suecia le vuelve las espaldas, hasta que en 1973 nuevos estudios invierten estas tendencias negativas, convirtiendo en realidad el pronóstico formulado a mediados del siglo XIX por Carlyle: Swedenborg es como una luz cuyo brillo no cesa de crecer.
La reconquista de los dominios metafísicos fue iniciada por un sueco nacido en Estocolmo en el año de 1688: Emmanuel Swedenborg. 
Estudió en la Universidad de Upsala. Viajó por Inglaterra y otros países europeos, donde fue reconocido como importante hombre de ciencias por sus tratados de Mineralogía, Anatomía y Fisiología —fue quién primero demostró la función de los pulmones—. Asimismo, anticipó opiniones y descubrimientos en Astronomía —origen solar de la Tierra— y Química Atómica. El Rey de Suecia lo nombró Asesor de la Junta de Minas.


En 1743 este apacible y dedicado científico recibió una llamada divina — "su iluminación"—, para consagrarse al mercadeo de las tierras divinas, en una carta a su amigo Harvey —estudioso de la circulación sanguínea— dice:

"He sido llamado a una función por el propio señor, que se ha manifestado en persona ante mí, su servidor. Y me ha abierto la vista para que vea en el mundo espiritual, me ha concedido hablar con los espíritus y los ángeles. 

La visión duró alrededor de un cuarto de hora. Aquella noche los ojos de mi hombre interior fueron abiertos y se hicieron capaces de ver en los Cielos, en el Mundo de los Espíritus y en los Infiernos".
A partir de esa fecha, Swedenborg se consagró a publicar los relatos de sus viajes por las geografías etéreas — Arcana Caelestia (1756), De Nova Hierolosyma (1758), Apocalipsis revelata (1766), Vera Christiana Religio (1771)—, debiendo publicarlos bajo sus expensas o con el auxilio del Duque de Brunswick o de algún otro príncipe de Dresden, Amsterdam o Londres, ciudad en la cual murió el 29 de marzo de 1772, no sin antes haber dejado fundada la peculiar Iglesia de la Nueva Jerusalén.

La Arcana Caelestia, publicada en ocho volúmenes, analiza el sentido universal de los libros del Génesis y del Exodo. En este texto, el sueco afirma que el mundo de los espíritus tiene la forma de un Gran Hombre donde ingresan seres vivos de todos los planetas de la galaxia.


La sumatoria de los espíritus crea un Hombre Máximo que contiene, proporcionalmente, a cada una de las almas que temporalmente allí habita. 
De igual manera, cada espíritu es ubicado según sus características, estado de ánimo y disposición moral. En cuanto a la apariencia del mundo espiritual: "... Se ven en él llanuras, montañas y colinas separadas por valles, así como lagos y cursos de agua.... 

Tan grande es la similitud entre el mundo espiritual y el mundo natural que el hombre, después de la muerte, está persuadido de que sigue en el mundo en que nació y que acaba de abandonar. 

De aquí que los recién llegados digan que la muerte es sólo una transición de un mundo a otro que es parecido" (Cielo e Infierno, núm. 582).


Nadie, según le contaron los ángeles a Swedenborg, es obligado a ir al Cielo o al Infierno, al contrario, ambos sitios están abiertos para todos, pero la personalidad del elector determinará su comodidad en el sitio escogido. 
Ahora bien, en el infierno la crueldad es controlada por Dios a través de sus Angeles, porque Él no desea que exista un mal superior al que existe en la Tierra.


El Infierno del autor sueco es muy parecido al expuesto por Valentino en su evangelio aparentemente apócrifo. 
Lo más relevante en el averno de Swedenborg son los cotidianos golpes de estado, de allí que no sea gobernado por el Diablo como tal, sino por una infinita sucesión de espíritus malignos que van del cargo más elevado al de simples servidores. 

Swedenborg, meticuloso y verosímil en sus observaciones, nos detalla la apariencia de los Cielos e Infiernos, los ropajes de los ángeles, las distintas sociedades que los conforman, los diversos roles desempeñados por ángeles y demonios. Por ejemplo, nos relata que en el cielo no existen ancianos, porque las personas van rejuveneciéndose a medida que progresan.



Ralph Waldo Emerson nombra a Swedenborg como el "último Padre de la Iglesia", y lo elogia por las semejanzas esenciales que utiliza para referir las correspondencias de ambos mundos. 

En cambio, Inmanuel Kant, molesto por haber comprado los ocho volúmenes de la Arcana Caelestia, lo considera el "archifantasioso de todos los fantasiosos", crítica su "estilo vulgar" y lo acusa de lunático. 

Por su parte, William Blake, inicialmente seguidor desmedido del sueco, lo ataca por su prosa inflada, su convencionalismo y su escasa imaginación. En nuestro siglo, Jorge Luis Borges nos presenta al místico como un ser curioso y extraño, casi literario...



Más allá de creer o no en las visiones de este contemplativo, podría afirmarse que Emmanuel Swedenborg nos legó un detallado mapa psicológico por cuyos senderos, de voluntad e inteligencia trabajada, podemos arribar a regiones del todo consustanciales con las mudables exigencias de nuestro temperamento. 

Hijo de un obispo luterano, nació en Estocolmo en 1688. Doctor en teología por la Universidad de Upsala, a los 21 años, trabaja en Inglaterra con Newton, y después en Noruega. 

Se consagra al ocultismo desde el 7 de abril de 1744, a consecuencia de una visión nocturna de un mago que le dicta una misión, y se dice en contacto con los espíritus de Virgilio y de Lutero. 

En 1757, declara haber visto el juicio final, y desde 1759, pretendió poseer videncia bajo auto-hipnosis.

Escribió 17 tratados. Su “De Caelo” o “Sobre el cielo y sus maravillas”, y “Sobre el Infierno”, según cosas vistas y escuchadas, aparecido en Londres en 1758, es el antepasado del espiritismo, que él llama pneumatología. Sus teorías tuvieron un enorme éxito en Escandinavia y entre los Rosa-Cruz. 

Fue también uno de los precursores del hipnotismo puesto que recurría a la auto-hipnosis para facilitar sus videncias.

Murió el 29 de marzo de 1772, en Londres, en la fecha anunciada por él.

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